A B O U T                                            W O R K S H O P                                            S H O P                                           



4.26.2011

Erase una vez


Hace un par de años, para ser exactos en mayo del 2009, en un viaje a Chile, íbamos paseando con Pere por uno de mis barrios favoritos de Santiago, llamado Rosas. Para mí es un sitio que extraño mucho, porque está lleno de tiendas para hacer manualidades. Para que os hagáis una mínima idea de cómo es, podéis imaginar toda Rambla Catalunya en Barcelona, de Diagonal hasta Gran Vía aproximadamente. De hecho, es mucho más grande, pero bueno, hay diversas zonas en el mismo barrio: todo un sector de dos pasajes llenos de mercerías, una al lado de la otra. Cintas, lentejuelas, mostacillas, hilos, telas, botones, etc. El paraíso handmade de Santiago.

Paseando por la calle de las Lanas, de pronto me llamó la atención un par de señoras mirando a una abuelita. Yo, como soy muy curiosa, fui a mirar qué estaba haciendo, y de pronto la vi ahí sentada, con sus cojines de flores y lanitas de color, bordando muy rápido con una aguja que parecía bordar prácticamente sola. Me acerqué y me agaché para mirar de cerca cómo lo hacía. No lo podía creer. Yo dije: “¡La quiero!”.

Además, yo estudiaba bordado tradicional, y ver eso tan rápido fue… ¡wow! En ese momento, ella me miró y me dijo que probara a bordar. Yo, con cara de sorprendida y feliz a la vez, tuve mi primer contacto con la aguja mágica y di las primeras puntadas. No me salió nada; pinchaba y pinchaba, y no bordaba.

Así que decidí comprar unas lanitas de muchos colores y una aguja, y al día siguiente regresé para que ella me diera mi clase de bordado mágico en la calle, sentada en el portal de una tienda de lanas. Después, en mi siguiente viaje a Chile, fui a visitarla de nuevo y compré varias agujas. Entonces ya me enseñó un par más de secretos.

¿Qué tiene de especial esta aguja? Es lo que muchos se deben preguntar. Es un pequeño secreto que enseña en clases y que hoy les quiero contar: las agujas que usamos en las clases las hace ella, están hechas a mano, incluso los divertidos enhebradores que desaparecen por arte de magia. Descifrar qué tipo de aguja es, es algo que los alumnos en las clases intentan averiguar. Hay algunos que dicen que podrían hacerlas, pero hasta incluso yo me pregunto: ¿cuál es el secreto de la aguja?




Ella es la Señora Wassa, la famosa abuela rusa de la Aguja Mágica _.
(La original, lo digo porque en Chile hay señoras que le copian las agujas, pero como toda imitación, es mala y se acaban rompiendo).

Doy las gracias por la ayuda a mis amigas que viven en Santiago. La fotografía la hizo Rocío hace unas semanas. Es el mismo lugar donde conocí por primera vez la aguja, y se pueden apreciar, por los lados, el kit que ella vende de flores y cojines bordados, todos de colores muy vivos. Ella es tan amable y simpática :D

Quiero agradecer muchísimo a Carla, que sin ella los talleres no serían posibles. Ella se encarga de ir en búsqueda de la Sra. Wassa y sus agujas, y hace de emisaria en todo lo que le encargo. Son tantos los favores que le debo que no acabaré nunca de darle las gracias. _

¡VIVA CARLA Y ROCÍO!

Les cuento un poco sobre nuestra abuelita favorita: vive hace 20 años en Santiago de Chile. Es una de las primeras mujeres que introdujo y puso de moda el bordado ruso en Chile. Bordar es algo que ella hace desde pequeña; es una tradición que su familia transmite generacionalmente. Su madre les enseñó cuando eran pequeñas, y ella y sus hermanas bordan desde que son niñas.

Este estilo de bordado ruso es muy popular en la provincia de Siberia y generalmente se enseña a los niños para introducirlos en el mundo de las manualidades. A la Sra. Wassa le llama mucho la atención y está muy contenta de que en España estén interesados en este arte, y sobre todo muy orgullosa de que en Barcelona las personas se animen a bordar.

4.15.2011

Algún día .....




 Me darán un premio por ser la mejor persona que pierde el tiempo inútilmente ...


4.01.2011

Expo colectiva de bordado mágico

Veo que las horas de bordado han valido la pena para hacer el flyer 
aunque mi parte favorita es por detrás ya se las enseñare lo único que puedo decir 
en estos momentos después de semanas sin actualizar el blog 
es que estoy ! MUY FELIZ ¡ de ver la participación 
de los ex alumnos en la convocatoria que hemos hecho
hemos recibido trabajos preciosos se notan que todos estan hechos con mucho cariño 
así que yo me siento orgullosa que con una sola clase 
hayan sido capaces de hacer cosas tan lindas
me siento muy orgullosa de ver que cada uno hizo volar a su imaginación que 
lo que quería lograr con el taller ha funcionado así que 
! a seguir Bordando !